YA NO PUEDO LEER
- LOLA J. ESPEJO
- 15 abr 2024
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 27 jun 2024
De pequeña me encantaba leer, me bebía los libros. Recuerdo engancharme a libros y no poder parar de leer hasta que me los terminaba, como ahora me engancho a las series. Sin embargo, desde que llegaron las redes sociales y sobre todo desde que tuve ordenador, todo el tiempo que invertía en leer se fue yendo a otros estímulos, a otras historias y efectivamente, ya no puedo leer. Para mí leer era sinónimo de salir de mis dramas de adolescente un rato para entrar en otros mundos diferentes, algo parecido a lo que ya comenté en otro artículo que me pasaba cuando iba al cine.

Últimamente, algo que me parte el alma es que soy incapaz de terminar ningún libro. Tengo como cuatro libros a medias. Libros de diferentes géneros y alguno que ya he leído y me quería releer porque me encantó y ni aun así. Llevo mucho tiempo dándole vueltas a esto porque recuerdo que me encantaba leer y me ayudaba a desconectar y relajarme. De pequeña leía mucho antes de irme a dormir y me quedaba dormida agustisimo… Ahora soy incapaz, siempre me quedo hasta tarde con el móvil (cosa que es, además, horrible para dormir).
Hace unos meses, fui a casa de unos amigos y vi que tenían muchísimos libros. Le pedí a mi amiga que me recomendara uno y me dijo que hiciéramos un trato: Ella me recomendaría y dejaría un libro y cuando lo terminara podría volver, devolverlo y coger otro. Aquel día me recomendó y dejó ‘Metafísica de los tubos’ de Amélie Nothomb. Es muy cortito y muy fácil de leer, es divertido y la verdad es que se lee solo. Cuando empecé a leerlo pensé: Este es, el libro con el que consigo romper esta racha horrible de libros a medias… Y no. Me lo llevo a todas partes y pienso: “Voy a coger un tren, seguro que en una hora avanzo un poquito, paso a paso”. Y cuando llego al tren, me pongo música, abro el Instagram y para cuando me doy cuenta ya no me da tiempo de leer nada.

He leído sobre el tema varias veces y la conclusión a la que siempre llego es que es culpa de la sobreestimulación que tenemos en el día a día. Consumimos información de forma compulsiva, ya sean noticias, vidas ajenas en redes sociales, contenido audiovisual, videojuegos… Y todo nos parece mejor que leer, porque estimula varios sentidos a la vez, es “más gratificante” a corto plazo, pero a la larga está haciendo que no sepamos parar de consumir, frenar un poco, que no sepamos aburrirnos y que necesitemos estímulos constantes. Por eso a partir de hoy me he propuesto leer más y parar más, estar más presente. Quiero utilizar los descansos entre trabajos, después de comer, antes de ir a dormir, etc. Para leer un poco. Empezaré por el libro que os comentaba y que ya tengo por la mitad y espero que al acabarlo me ayude el impulso de haberme terminado un libro después de… ¿Años? y poder coger carrerilla de nuevo.
Comments